La secretaria, con ansias, espera el día laboral, pero no se da cuenta de las aventuras que la esperan.Es una mujer joven, vestida con impecabilidad en su atuendo profesional, complementada con un par de gafas elegantes que le dan una apariencia de confianza y madurez más allá de sus años.Su jefe, un hombre exitoso y emprendedor, tiene una fama notoria entre el personal por sus maneras lascivas y su insaciable hambre por placeres.Ella entra en su oficina, a la vez elegante y recatada, lista para llevar a cabo sus tareas diarias con diligencia y eficiencia, sin sospechar del tormento que se cierne entre ellos.A medida que transcurre el día, se sumerjen cada vez más en su trabajo, compartiendo intercambios hushed que parecen transmitir una lengua oculta entre ambos, una que solo comprenden ellos.Sus dedos se rozan mientras manejan documentos, su química crece a medida que avanzan los segundos.El aire es denso con la anticipación y el deseo cuando sus ojos trazan los contornos de su cuerpo a través de su costoso traje.Su mirada se detiene en su escritorio desnudo, un lugar donde muchas secretos se guardaron y pronto serán revelados.Cuando toca un archivo, no puede evitar notar cómo la hace sentir de ansiedad.Él la atrapa mirándolo y sonríe de forma tórrida, sus ojos llenos de hambre desbocada e invitación para una orgía satisfactoria.Sin tiempo para perder, la secretaria se desviste hasta su ropa interior, dejando nada al imaginario y excitando a su jefe más allá del crepúsculo.Su cuerpo desnudo resplandece bajo las luzes cálidas de la oficina mientras comienza a montarle como una mujer descontrolada.El aire está cargado de su amor de sudor y pasión, explorando entre los cuerpos uno al otro con una intimidad sin parangón.Sus dedos hacen maravillas en su engrosado y palpitante polla, tediando y rastreando en un ritmo embobante.Ella se lo lleva hondo a la boca, mordiendo fuertemente mientras su vagina se hincha de deseo.Sus dedos se dirigen a su vagina húmeda, jugando con la delicada labia antes de llegar a su delicada clítoris, masajeándolo en círculos, acercándola a esa orgasmo maravilloso que anhela.Su polla desliza sin resistencia dentro de su vagina apretada mientras se montan el uno al otro, buscando placer y alivio de las intensas sensaciones que los envuelven.Ella alcanza su orgasmo primero, sus paredes retorcidas alrededor de él con abandono, ya que su orgasmo lo sigue rápidamente con una serie de convulsiones que los deja ambos débiles y satisfechos en los brazos del uno del otro.A medida que se recupera de su orgasmo, él mira a sus ojos, sabiendo que más vendrá.Asiente con la cabeza, dejando clara su afirmación sobre lo que vendrá después.Ambos se vestirán para otra jornada en la oficina, la ropa ocultando el testimonio de la fantasmagoria compartida por la secretaria y su jefe en su pequeña alegría de mesa.
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